ANA PILAR PEREZ ORTIZ DE ZARATE
Ejerzo como abogada desde el año 1996, ya cuando estudiaba la rama del derecho de familia y sucesiones me pareció fascinante.
Comprendo completamente la importancia y la complejidad de la rama del derecho de familia y sucesiones. Cuando uno se enfrenta a una ruptura familiar, por elección propia (divorcio o separación) o por circunstancias inesperadas (fallecimiento), se tambalea toda la vida, no solo se nos ha roto el sueño con el que contrajimos matrimonio, esta ruptura afectará a nuestra vida: desde amigos a hijos, como nos organizaremos con ellos, cómo serán las vacaciones, nuestra vivienda, nuestra economía, el trabajo, todo nuestro patrimonio (la segunda vivienda, el dinero en cuenta, las inversiones, el coche, las deudas...). y ¿si además soy víctima de maltrato o me acusan de ello? y cuando el hijo es menor como acepta los bienes de la herencia? ¿puedo vender la vivienda, las acciones si también pertenecen al hijo? Toda una casuística que es fundamental abordarla con cuidado y consideración, además de con preparación.