Abogados Custodia Compartida

Diferencias entre Custodia Compartida y Custodia Monoparental

Cuando se habla de custodia estamos refiriéndonos a quien convivirá con el hijo de forma habitual cuando existe una separación conyugal o un divorcio. Las dos soluciones existentes son convivir con uno de los padres o con ambos. El criterio para la elección de una u otra forma se centrará en el interés del menor y su protección.

Lo habitual en España ha sido aplicar la custodia monoparental a favor de la madre por defecto. Sin embargo, a partir del año 2011 cambió a favor de la custodia compartida.

La custodia monoparental, o también llamada custodia exclusiva, concede la guarda y custodia de los hijos a uno de los progenitores, normalmente la madre. Al padre, o al progenitor que no tiene la custodia, se le concede un derecho de visitas que variará en número dependiendo de cada caso.

La custodia compartida, sin embargo, consiste en la concesión de la guardia y custodia de forma compartida entre los progenitores de forma equitativa. La forma de llevarla a cabo se diseñará a favor de los intereses del menor. De esta forma, la custodia compartida se puede llevar a cabo:

1.         En el mismo domicilio (de forma que el menor permanece en el domicilio familiar y son los padres los que se mudan);
2.         En distintos domicilios (opción en la que es el menor el que cambia de un domicilio a otro);
3.         De forma coexistente (cuando los progenitores viven en el mismo domicilio).

Por último, añadir otra forma de custodia conocida como custodia partida o distributiva (cuando hay más de un hijo y se reparten entre progenitores) y la guardia y custodia que se aplica a un tercero (cuando ninguno de los progenitores tiene la custodia del hijo y se atribuye a un tercero, en aquellos casos de incapacidad o fallecimiento).

En qué casos se puede pedir Custodia Compartida

La custodia compartida se solicita cuando existe una ruptura conyugal y, como consecuencia del fin de la vida en común de pareja, ambos progenitores quieren compartir el tiempo, la educación y la convivencia del hijo. 

La regulación de la convivencia entre progenitores con el hijo en común está recogida en el Código Civil en el artículo 92. En este, la custodia compartida tiene como objetivo proteger las necesidades del menor y fomentar el respeto mutuo entre progenitores.

Cuáles son las claves para dar la Custodia Compartida

La custodia compartida poco a poco va ganando terreno y cada vez es más común su aplicación, aumentando año tras año el número de progenitores que la disfrutan. Los criterios más habituales para otorgar la custodia compartida a los padres son:

1.         la ubicación de los domicilios de los progenitores en función de los horarios escolares y extraescolares del menor;
2.         el tipo de relación que tienen los progenitores con el menor;
3.         el número de hijos;
4.         el respeto y el cumplimiento de los deberes con los hijos;
5.         la opinión del menor (el juez tomará en cuenta la opinión de los niños a partir de los 12 años y, si son menores, se valorará la evaluación de un psicólogo);
6.         el tipo de acuerdo que hayan realizado los progenitores;
7.         los informes legales que se hayan realizado o solicitado;

Teniendo en cuenta todas estas consideraciones, el juez dictamina el tipo de custodia que más favorezca la educación y la actividad normal del menor.

En qué casos se puede denegar o quitar la Custodia Compartida

El Juez puede denegar o quitar la custodia compartida si no se cumplen los deberes establecidos tras la separación o divorcio. Entre los motivos, un juez puede quitar la custodia a un progenitor cuando sufre una adicción o si va a entrar en prisión. Por ello, un juez puede privar a un progenitor la custodia si lleva un estilo de vida que pueda afectar a la estabilidad del niño a nivel emocional y de desarrollo.

También puede ser un motivo para denegar la custodia cuando se han desatendido las necesidades principales del menor, como puede ser la falta de higiene, falta de alimento, desatención en la escolarización, falta de seguridad o desatención médica.

Otro de los motivos que pueden quitarte la custodia es que haya un cambio de residencia de uno de los progenitores. Si uno de los progenitores cambia su residencia por otra muy lejos del entorno escolar, familiar y social al que está acostumbrado el menor, puede ser un motivo para la retirada de la custodia porque, en este caso, puede afectar al desarrollo del menor.

También puede retirarse la custodia en casos en los que uno de los progenitores ejerza una manipulación ostentosa en contra del otro progenitor. La falta de respeto entre cónyuges puede suponer la anulación de la custodia a favor del otro cónyuge.

Y por último, como no, en casos de conductas violentas. Si existe maltrato, abuso o daños psicológicos o físicos, se le retirará la custodia al progenitor responsable.

Cómo pedir la custodia de un hijo a Abogado de Familia especialista

En caso de querer solicitar la custodia de un hijo, el progenitor tiene que realizar una demanda ante un juez de familia, preferentemente con la ayuda de un abogado de familia especialista. 

En este caso, el abogado realizará un análisis de la situación de ambos padres para dictaminar los horarios a partir de los cuales se realizarán las visitas y la convivencia de los progenitores. 

En la medida que se respete la opinión del menor y se satisfagan sus necesidades e intereses, el juez dictamina la custodia compartida solicitada por los progenitores y la adaptará a las circunstancias específicas de la familia y el menor implicado.